Siempre nuevo, infinito permanente,
ala leve en la atmósfera callada,
vuelo firme en la áspera tormenta,
insomnio soñador de cada noche.
Me despierta a las siete y labio en punto
de la noche auroral de tus pupilas,
del susurro amarillo de tu risa,
de la puesta de sol de tus fronteras.
Soñoliento me visto tu cabello
y la piel de tu cuello, y tu perfume.
Reencuentro milenario con la vida.
Es todo plenitud que baja y sube,
indecible escalofrío vena adentro,
y tus labios, tus pechos, ¡maravilla!
(1 DE ENERO DE 1985)
Poemas, poemillas... A lo largo de los años se han ido quedando como el arpa de Bécquer, en el ángulo oscuro del papel archivado. Que les dé un poco la luz y el brillo de alguna mirada que se quiera perder sobre ellos.
sábado, 19 de mayo de 2007
sábado, 12 de mayo de 2007
No acabas de traerte y ya te llevas
No acabas de traerte y ya te llevas,
redondo anhelo que vacía y queda
oscuro el corazón de pena oscura,
encogido el aliento de tormenta.
Se me apaga el latido de tu sombra,
nube inmensa de horas y de besos,
y queda el horizonte limpio, terso,
invernal de caricias y amapolas.
Hoy, otoño, me caen ya las hojas
agitado por el soplo de tu ausencia,
camino vecinal de la derrota.
Me recorren negros pájaros en ruta.
¿Presienten el invierno en mi horizonte
como una tarde gris, como una tumba?
(30 DE DICIEMBRE DE 1984)
redondo anhelo que vacía y queda
oscuro el corazón de pena oscura,
encogido el aliento de tormenta.
Se me apaga el latido de tu sombra,
nube inmensa de horas y de besos,
y queda el horizonte limpio, terso,
invernal de caricias y amapolas.
Hoy, otoño, me caen ya las hojas
agitado por el soplo de tu ausencia,
camino vecinal de la derrota.
Me recorren negros pájaros en ruta.
¿Presienten el invierno en mi horizonte
como una tarde gris, como una tumba?
(30 DE DICIEMBRE DE 1984)
domingo, 6 de mayo de 2007
Nieva recuerdos la noche gris-tardío
Nieva recuerdos la noche gris-tardío
en "sálvese quien pueda" inesperado,
y en ordenado afán de geometría,
cruzan mis días el sereno espacio.
Nieva en las horas de mirada absorta
tras el cristal de mi soñar testigo.
Inmensa pena del nevero madre
verte fundida en mi deseo antiguo.
Llegas y partes tan sin hacer ruido
que tengo miedo de pisar tus pasos
y te me filtres por entre la pena.
Cuando el reclamo de la noche suena
tiembla mi dedo de esperanza falto
y sueño ayeres y los voy sembrando...
(28 DE DICIEMBRE DE 1984)
en "sálvese quien pueda" inesperado,
y en ordenado afán de geometría,
cruzan mis días el sereno espacio.
Nieva en las horas de mirada absorta
tras el cristal de mi soñar testigo.
Inmensa pena del nevero madre
verte fundida en mi deseo antiguo.
Llegas y partes tan sin hacer ruido
que tengo miedo de pisar tus pasos
y te me filtres por entre la pena.
Cuando el reclamo de la noche suena
tiembla mi dedo de esperanza falto
y sueño ayeres y los voy sembrando...
(28 DE DICIEMBRE DE 1984)
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